Nos hemos acostumbrados a las señales de tráfico, a que los coches tengan prioridad en todo, como si la vida de una ciudad girase alrededor de los vehículos. Por ello nos pasa inadvertidos determinados carteles que se colocan delante de edificios históricos, de lugares pintorescos.
Es el caso de la Torre Alminar de San Juan, en la plaza de San Juan, Colegio de las Esclavas. No había otro sitio dónde poner el cartel de prohibido.
No si desde luego el alminar de mi cole es una alegrÃa. Primero el tutú metálico y también las señales.
Es una lástima que el patrimonio se desprecia totalmente, y yo que entre travesuras lo conocà hace años también por dentro… no tiene casi peldaños, y técnicamente es un palomar.
Gracias por preocuparte Mike.